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Una Gran Decisión... Parte 11
Mi esposa al estar totalmente sentada sobre de el y sentir toda su verga de Alberto, dentro de ella. Solo gimió clavando sus uñas en el. Por si parte Alberto la tomo se la cintura bajando la mucho más a el. Aferrado a clavar más a fondo su verga en ella y así poder terminar lo más profundo que podía en la vagina mi esposa. Ambos gemían con fuerza, ya que ambos estaban terminando una vez más juntos. Desvaneciendo todo su ser de mi esposa sobre Alberto.
Ambos ahí se quedaron recostados una sobre el otro. Con la respiración entre cortada de ambos.
Así se quedaron un momento hasta que ella se recostó a un lado de el abrazados. Ella la me pidió que me recostara junto a ella y así lo hice.
Ella recostada sobre el pecho de Alberto y yo recostado sobre su espalda de ella.
Permanecimos unos instantes así. Una rara sensación de estar los 3 así abrasados.
Alberto le acariciaba el pelo a ella y yo su espalda, muestras ella le acariciaba su pecho a el. Entonces Alberto la tomo de la mano y la guía hasta su verga, lo cual ella la tomo y comenzó a acariciar jugando con ella. El se retiró el condón y así lleno de semen ella jugaba. Facilitando las caricias. Su verga de Alberto comenzó a retomar firmeza a lo cual el de dijo a mi esposa. Corazón ya me lo volviste a poner bien firme. Que dices si le seguimos con ésto??? Ella solo con la cabeza afirmó entonces Alberto le dijo. Ponte en 4 si corazón a lo que ella obedecío sin duda alguna.como Alberto y yo nos incorporamos de la cama. Admirando tan bello panorama que mi bella esposa nos daba ambos. Alberto se colocó otro condón y se fue acercando a ella tomándose su tiempo viendo lo que tenía frente a el, con ambas manos acarició sus nalgas de ella y separando un poco, exclamó que rica estas amor, si que eres un delicia y volteando a verme me sonrió. Una sonrisa dificil de describir. Cómo diciendo mira como otra vez me cojere a tu mujer. Cornudo. Un escalofrío recorrió todo mi cuerpo. Más viendo en la forma que me vio y sonrió Alberto. Vi claramente como esperaba un poco más las nalgas de mi mujer y su verga bien erecta si perfilaba a la entrada de la panochita de ella. El se la fue metiendo poco a poco y ella soltaba un suave gemido. A lo cual de un solo empujón se la dejo ir toda. Ella solo apretó las sábanas con sus manos. El tomo de la cintura y así el comezón a bombearla una y otra vez y cada vez la embestidas eran más rápidas y fuerte. Mi esposa ya de plano gritaba de placer en la forma que el se la cogía. Y a ese ritmo el le pidió que se empinara un poco más. Que recostara las su pecho sobre la cama y así quedará con las nalgas más paradas para así el darse vuelo para entrar y salir de ella a su gusto. Ella gritaba con fuerza ahhh ahhh ahiii ahiii. El solo le dijo así te gusta amor . Eh dime si así te gusta. Ella solo decía siiiii así me gusta. Ahhhh así ahhh. Que ricoooo. Asiiiii.
El no paraba de decile lo rica que estaba y que cerrada estás. Me aprietas muy rico mi verga. Así amor así que rica estas. Si así me lo aprietas con Tigo cosita ya me imagino como lo has de apretar con tu culito amor. Eh amor siii así. Siiii . Hasta que de plano le pidió permiso para penetrar la por su culito. A lo que ella dijo que no. Alberto insistió. Anda amor dame permiso de entrar por atrás. Ella volvió a decir Nooo
Lo tienes muy grande y grueso. Y me vas a lastimar.
El dijo está bien corazón. Y el siguió dándole así en cuatro. Pero el aún no quitaba el dedo del renglón y mucho menos del dedo de su culito. Que lo frotaba mientras le daba verga por su panochita a ella. El comento amor tu culito si quiere que entre. Ándale dame chance si. Esta bien dilatado. Tu esposo ya lo lubricado un par de ocasiones hace rato y yo también quiero disfrutar de tu rico culito. Anda amor. Si me dar permiso......
Esta historia continúara....
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