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En la fiesta de XV de mi cuñada.

Bien, agradezco a quienes han leido y comentado la historia anterior, espero con ansias que se de una segunda y tercer parte al menos, pasaré a platicarles esta historia, presentadonos, Soy Nestor y mi esposa Noemí, yo la conocí cuando ella tenia 21 y yo 35, aunque ella ya me había conocido un par de años atrás yo no sabía de su existencia, pero eso lo dejaré para la historia del primer encuentro que tuve con ella que viví algo que jamás habia vivido.


Bien, ella y yo apenas y teniamos 5 meses de vivir juntos, los tres primeros en casa de ella y sus padres, no hace falta describir a mi esposa, en nuestro perfil pueden ver algunas fotos, sin embargo lo haré, mi esposa resalta por ser agradable, alegre, a todo mundo saluda, bromea y demás, pero igual es explosiva si algo no le parece, de inmediato te responde si algo no le agrada y de mala manera, mientras que su físico es ligeramente bajita, 1.60, pechos pequeños, muy acentuada su cintura y tremendas caderas, sus caderas resaltan donde quiera que ande y como ande vestida.

Llegó el día de la fiesta de su hermana, una fiesta de XV de rancho, con grupo en vivo por la tarde, la comida, esas fiestas en las que no requieres invitación para ir, en la misma casa, que el patio frontal tiene grandes árboles, uno de almenos 80 años de edad, simplemente precioso ese ambiente entre los arboles, la sombra que cobijan para un evento donde el techo es el cielo y las paredes el horizonte, la casa es pequeña y simple, un cuarto amplio donde duermen todos, no hay privacidad, con dos corredores un frontal y uno posterior, el corredor frontal ya convertido en cuarto con paredes de madera, techo de lamina, el corredor posterior descubierto solo con el techado extendido.

Ella usaba un vestido negro largo super entallado, ella es de usar ropa muy ajustada y muy corta, al principio creia que me molestaría, pero se sorprendio cuando le decia por mi mientras mas corto el vestido mejor, y entallado simplemente marivilloso, pero esa ocasión decidio usar vestido largo casi a los pies, pero repito, entallado, podian verse esas grandes caderas desde lejos, yo prefería pasar el tiempo atras, no al frente donde todos los invitados estaban, a la casa entraban y salian muchas personas, familiares y vecinos cercanos y otros de lejos, ese corredor que se convirtio en cuarto independiente, tenia un acceso directo al patio frontal y otro al cuarto principal y único de la casa, la puerta frontal permanecio cerrada, pero la puerta que da acceso a la casa abierta.

Hubo un momento durante la tarde mientras se desarrollaba la fiesta, que la vi entrar, dirigirse hacia el cuarto principal y pasar al secundario adaptado antes corredor, y fue donde decidí entrar, no habia nadie, pero las puertas estuvieron abiertas para evitar sospechas, entre hasta donde estaba ella, el ancho de ese cuarto es el de un persona parada y una cama individual, asi que algo buscaba en una bolsa sobre la cama y al llegar solo nos hicimos un poco hacia un lado para no estar directamente a la puerta, estando de pie le sujete el cabello con fuerza y la coloque su cara sobre la cama, me agache para subir su largo vestido hasta descubrir esas grandes caderas, y poder bajar sus medias y pantaletas solo a altura necesaria para dejar al descubierto ese gran manjar que una mujer tiene, sus caderas y nalgas descubiertas, teniendo a merced su vagina para dejar los instintos hagan lo suyo.

Una ves teniandola a ella empinada sobre la cama, yo solo abri mi pantalón, abriendo el cinto, el boton y el cierre, dejando mi virilidad al descubierto, sin pensarlo me decidi a entrar, fue un poco complicado ya que ella no estaba preparada para recibirme, sin embargo apenas entré con dificultad estando ella seca, y al salir mi pene estaba totalmente cubierto de su sabor, al entrar una segunda vez todo fue diferente, con facilidad y con una humedad que fué en aumento, empujé durante un corto tiempo sin calir, en mi pelvis podia sentir su sabor, y ella aunque en todo momento decia que no, que estaba loco, que nos verían, puesto que las paredes de madera dejan rendijas donde cualquier facilmente podia espiarnos, y a plena luz del dia, no paré, no paré y seguí empujando mientras ella le comenzaban a temblar las piernas, y mis testiculos ya los sentia empapados, me pedia que parara que ya era suficiente, pero en lugar de parar solo sujetaba con mi mano izquierda su cadera mientras que con mi mano derecha jalaba su cabello y mi codo reposaba en su espalda, aceleré y descargue todo lo que tenia para darle, todo lo mas al fondo posible, suspiró, la solté y exclamó, que le había fascinado pero había sido una locura, procedimos a vestirnos, ella buscaba algo para secarse, ya que lo nuestro escurria por sus piernas, mientras que yo no la dejé, y le subi sus pantaletas y medias, baje su vestido y me cubri mi virilidad bajo el boxer, di la media vuelta y en la puerta termine de cerrar el cierre y abrochar el boton del pantalón, mientras que al sujetar el cinto, justo al terminar, apareció una persona que por suerte no sospechó nada y la buscaban a ella, a lo que respondí aqui esta pasale, y me retiré, sali y continué la fiesta.

Espero les haya gustado, gracias.

Pd. Jamás pense en escribir estas historias, y ahora que escribo esta segunda, me doy cuenta que hay muchas, y deben ser escritas, saludos.